En pocas y sencillas palabras, el metabolismo es un conjunto de procesos relacionados con la ingesta y el gasto de energía, y la tasa metabólica es la velocidad de tu metabolismo, o el número de calorías que quemas en un tiempo determinado. En general, no hay mucho que podamos hacer para cambiar nuestro metabolismo, pero, según explica Christian Soetebier, especialista de entrenamiento, hay algunas maneras efectivas para sacarle el máximo partido, especialmente si quieres perder peso.
#1: HIIT
El entrenamiento de intervalos de alta intensidad (HIIT) es un componente esencial de la experiencia de Freeletics. ¡Y con mucha razón! El entrenamiento HIIT no solo tiene un fuerte efecto cardiovascular anaeróbico, sino que también induce el consumo excesivo de oxígeno tras el entrenamiento (EPOC, por sus siglas en inglés), es decir, el aumento de la tasa de consumo de oxígeno luego de un entrenamiento HIIT. ¿Qué significa esto? Bueno, la naturaleza agotadora del entrenamiento HIIT fuerza al cuerpo a recurrir a un gran número de procesos metabólicos y energéticos. Así que mientras descansas, tu cuerpo sigue trabajando para restablecer su equilibrio y continúa quemando calorías durante el proceso.
#2: Entrenamiento de fuerza
Mientras que el entrenamiento HIIT te proporciona el beneficio del efecto EPOC, el entrenamiento de fuerza puede quemar muchas calorías y, con el tiempo, mejorar la composición corporal. Practicar el entrenamiento de fuerza con regularidad hace que los músculos involucrados quemen más calorías cuando están reposo, y esa cantidad aumentará cuanto más entrenes. Si tu objetivo es perder peso y ganar musculatura, el entrenamiento de fuerza debería formar parte de tu rutina de entrenamiento y no deberías pasarlo por alto.
#3: Más proteínas
Por sorprendente que parezca, en realidad hay una manera de quemar más calorías comiendo más: ¡consumiendo proteínas! Cuando comemos proteínas, nuestro cuerpo se ve obligado a usar energía para llegar a todos los aminoácidos dentro de la proteína. Esto se conoce como el "efecto térmico de los alimentos", o ETA, y hace que las proteínas pesen menos en términos de equilibrio calórico en comparación con otros macronutrientes como los hidratos de carbono.
Asimismo, comer más proteínas te ayudará a desarrollar más músculo y a mejorar tu composición corporal, mientras que también disminuye el apetito.
#4: Beber más agua o té verde
Otra forma de acelerar tu metabolismo es evitar las calorías líquidas que están “vacías”, como los refrescos. ¡Opta por las bebidas sin calorías como el agua y el té!
Las bebidas estimulantes como el té verde y el café también son conocidas por acelerar el metabolismo, ya que disminuyen el apetito. Sin embargo, ten cuidado de no tomar té o café demasiado tarde durante el día o perderás el sueño, otro factor que puede ser perjudicial para el metabolismo.
#5: La termogénesis por actividad sin ejercicio (NEAT)
Una forma menos obvia (pero efectiva) de acelerar tu metabolismo es aumentar la termogénesis por actividad sin ejercicio (NEAT, por sus siglas en inglés). Este concepto se refiere a todos los movimientos que queman calorías, pero que no entran en la categoría de ejercicio. Un ejemplo típico de la vida diaria es subir las escaleras en vez de subir en ascensor. La NEAT puede ser muy eficaz para estimular el metabolismo ya que, a diferencia del entrenamiento, se puede hacer constantemente a lo largo del día.
Resumamos:
Aunque el metabolismo no es algo que podamos controlar demasiado, existen algunos trucos para acelerarlo levemente y así obtener mejores resultados físicos.