No dejes que la idea de sentir dolor después del ejercicio haga que dejes tu entrenamiento para otro momento. Cuando pones a prueba los límites de tu cuerpo, es normal que lo notes al día siguiente. Aunque solo sea un poco. Es cierto que algunos podrían usar esto como excusa para saltarse el siguiente entrenamiento, pero existen formas realmente rápidas y eficaces que ayudan al cuerpo a recuperarse. Sigue estos consejos y ahórrale el dolor a tu cuerpo. Así evitarás que levantarse de la cama al día siguiente sea un suplicio.
Haz estiramientos
Hacer estiramientos es una parte importante de tu ejercicio. Antes y después. Hacer estiramientos después del entrenamiento aflojará los músculos tensos y enviará una señal al cerebro para decirle que el entrenamiento ha terminado. Que es hora de relajarse.
Come proteínas
Ya sabrás que el entrenamiento de Freeletics le pasa factura a los músculos. Esto no es nada malo. Esa es la razón por la que cada semana eres más rápido y estás más fuerte. Solo tienes que asegurarte de nutrir tu cuerpo con muchas proteínas, vitaminas y minerales, ya que ayudan en la regeneración muscular. Come alimentos ricos en proteínas y algo de fruta o verdura media hora después de cada entrenamiento. Prueba con pescados como el atún y el salmón, frutos secos y semillas, y cortes magros de carne de res.
Duerme
Cuando duermes tu cuerpo se repara a sí mismo. No tienen por qué ser necesariamente 8 horas. Solo tienes que asegurarte de que es la cantidad justa para que tu cuerpo se recupere de los intensos ejercicios. Y asegúrate también de que sea un sueño bien profundo. ¡Sin dormitar y sin interrupciones!
Manténte hidratado
Ten el agua siempre a mano para cuando termines tu entrenamiento. Si lo estás dando todo, te vas a acalorar y a empezar a sudar. Beber agua ayuda a calmar el cuerpo y a iniciar los procesos de recuperación.
Enfríate
No te pares de repente cuando acabes tu entrenamiento. Acabarás mareado después y dolorido al día siguiente. Con tan solo caminar durante cinco minutos, el cuerpo vuelve a un estado relajado. Es importante para tu circulación y evitarás que subir las escaleras al día siguiente sea un suplicio.
Tu entrenamiento debería ser duro, por supuesto. Al que algo quiere, algo le cuesta. Pero nunca se debe ignorar lo que te diga tu cuerpo. Recupérate rápidamente. Haz tus ejercicios aún más rápido. En el Centro de conocimiento de Freeletics podrás encontrar mucha más información sobre la recuperación, sobre los procesos que se ponen en marcha y cómo se puede acelerar.