Un estudio ha demostrado que el 30-50% de los runners sufre malestar en el tracto gastrointestinal (GI) inferior, o molestias en el estómago durante carreras largas o intensas. Esto puede entorpecerles el entrenamiento o, aun peor, arruinarles las carreras.
Pero ¿por qué es tan común que los runners sufran problemas de estómago? ¿Hay algo que podamos hacer para evitarlos antes de que frenen tu PB o tu entrenamiento en general? El especialista en entrenamiento de Freeletics David Wieners tiene la respuesta.
Correr es, por naturaleza, un ejercicio intenso e intrínsecamente discordante que somete a presión al cuerpo y a todos sus órganos, incluyendo el estómago y el colón, causándoles dolor. Ese dolor hace que los alimentos y los desechos se muevan por el tracto gastrointestinal más rápidamente mientras corres, lo cual puede resultar en irritación y en la necesidad de ir inmediatamente al baño. Además, al correr, la sangre se desvía de los intestinos a los músculos que estás entrenando, disminuyendo así su funcionalidad y predisponiendo a los runners a tener problemas de estómago y una variedad de molestias en el tracto gastrointestinal inferior.
Cada vez hay más evidencias que demuestran que estos problemas se pueden evitar por completo si los runners hacen pequeñas modificaciones en la dieta y en el estilo de vida. Estas son algunas de ellas:
1. Mantente hidratado
Una buena y correcta hidratación es la base de una digestión óptima porque contribuye a descomponer los alimentos, permitiéndoles una fácil digestión. Si estás deshidratado, la digestión disminuye la velocidad, y eso puede llevar consigo problemas en el estómago.
No es ningún secreto que los runners sudan, y esto aumenta notablemente tu riesgo de deshidratación, lo cual podría causarte un malestar estomacal mientras corres.
2. Préstale atención a tu alimentación
La mayoría de runners detectan que la causa de sus molestias estomacales se debe a su alimentación. Incluso los cambios más sencillos, como evitar alimentos altos en fibra o grasa antes de una carrera o una competición puede ayudar a mantener esos problemas a raya. En su lugar, se recomienda comer alimentos que no puedan "bloquearte", como la pasta blanca, el arroz blanco y los plátanos.
3. Cuida de tu intestino
El 70% de tu sistema inmunitario está situado en el intestino, y cuidar de tu función inmunitaria es realmente importante para asegurarte de que rindes al máximo. Cuando corres pueden regresar las enfermedades persistentes, causándote molestias estomacales, así que toma medidas para mejorar tu sistema inmunitario y tu salud intestinal tomando un complemento probiótico cada día. Hay evidencias sustanciales que demuestran que los probióticos pueden potenciar el sistema inmunitario y ayudar con los problemas estomacales, así que son un complemento ganador para los runners.
4. Evita la cafeína
Muchos runners confían en la cafeína como potenciador de la energía antes de salir a correr, pero la cafeína es, en realidad, un activador común de irritación intestinal. El café no es el único que contiene cafeína, sino también el té, los refrescos o bebidas azucaradas y las barritas de chocolate, así que fíjate bien en qué bebes y comes antes de entrenar para ver si esa podría ser la causa de tus molestias estomacales.
No hay nada peor que notar el principio de un malestar estomacal a la mitad de una carrera. Cada persona es diferente, por eso es importante encontrar la solución que te venga bien a ti, pero seguir estos cuatro pasos es un comienzo a prueba de fuego para mantener tu estómago en forma.