Todos los Atletas Libres saben que cualquier ejercicio es mental al 90%. Pero, como cualquier músculo, la mente puede estar cansada, agotada y necesita rejuvenecerse de vez en cuando. ¿Que cuál es la solución? Entrenar conscientemente.
Es importante dedicarle tanto tiempo a cuidar de nuestro bienestar mental como le dedicamos al físico. Cuidarte a ti mismo es algo más que ir al gimnasio tres veces por semana. Tener tiempo para reflexionar es crucial para nuestro bienestar mental, pero muchos de nosotros llevamos una vida tan ocupada, que a menudo es difícil encontrar tiempo para nosotros mismos.
Aquí es donde entra en acción tu workout: cuando lo único en lo que piensas es en la próxima ronda o repetición, no tienes tiempo para preocuparte por tus problemas. Cuando entrenamos, nos concentramos en nosotros mismos y en nuestro cuerpo: esta es la reflexión consciente por excelencia.
Entrenar duro no es solo un workout físico, sino también mental. Nos obliga a concentrarnos, a ser conscientes de nuestro cuerpo y a centrarnos en el momento actual. Como cualquier otro músculo, la mente puede crecer y mejorar. A la vez que aprendes a concentrarte en tu cuerpo, en el momento y a eliminar las distracciones que te rodean, mejorará tu rendimiento.
Márcate objetivos y atente a ellos
Entrenar conscientemente es entrenar con una meta. Marcarte objetivos es una parte importante del entrenamiento consciente, ya que te da algo tangible en lo que centrarte y a lo que aspirar. Con un claro objetivo en la mente, es más fácil eliminar distracciones y reducir el ruido del exterior, y eso sin mencionar cómo te motiva a aprovechar el workout al máximo. Un sentido de logro, da igual lo pequeño que sea, es una parte crucial para fortalecer la mente.
Concéntrate en tu respiración
Prestarle atención a tu respiración te hace concentrarte en el momento. Al distraerte del dolor del ejercicio o de cualquier distracción externa, ejecutarás el ejercicio más eficazmente. Piensa en lo que estás haciendo ahora mismo, no en los 100 Climbers que te esperan, ni en lo que tienes que hacer en la oficina esta semana. Las distracciones nos impiden alcanzar nuestros objetivos. Una mente centrada es una mente fuerte.
Sé consciente de tu cuerpo
Presta atención a cómo se siente tu cuerpo. Siempre deberías aspirar a entrenar duro, pero también de forma INTELIGENTE. Eso significa tomarte tiempo para evaluar el estado de tu cuerpo: ¿Cómo se sienten los músculos? ¿Estás cansado? ¿Tienes suficiente energía? Ser consciente de cualquier molestia o dolor no solo puede prevenir lesiones, sino que, además, puede ayudarte a dar un poco más de ti. Entrenar es la forma ideal de conectar el cuerpo con la mente. Los dos están más conectados que nunca cuando la mente obliga al cuerpo a terminar esos últimos diez Burpees.
Resumamos:
El estado mental que tienes durante un workout influye directamente en tu rendimiento. Una mente totalmente concentrada en el cuerpo, en el entorno y en el objetivo inmediato llevará a un rendimiento más centrado y gratificante. Es fácil olvidar la importancia de la fuerza mental para tu fuerza física y tu bienestar general, así que concentrarte en entrenar conscientemente es la forma perfecta de optimizar tu rendimiento y convertirte en el mejor Atleta Libre que puedes ser.