La historia de Doris es una historia de transformación con la que muchos padres pueden sentirse identificados.
Justo antes de embarcarse en esta trayectoria, Doris sabía que su estilo de vida podía llevarle a engordar, así que comenzó a hacer cambios, pero sin conseguir los resultados deseados.
Antes de tener niños, Doris estaba relativamente en forma y no tenía problemas de peso. Corría con regularidad y jugaba al tenis en competiciones.
Casada y con dos hijos, Doris ganó casí 15 kilos en el embarazo. Su vida cambió de forma radical y para ¡mejor! Pero aunque a nivel persona se sentía plena y feliz, no podía cambiar las «manijas del amor» como las llama ella.
Como muchas mujeres, Doris no estaba satisfecha con su apariencia física tras el embarazo. Y aunque intentaba prestar atención a su alimentación, sabía que debía hacer algo más. Así que decidió retomar la actividad con la que disfrutaba antes de formar una familia: correr. Además, continuó jugando torneos de tenis y hace un año, más o menos, empezó a realizar entrenamientos de intervalos de alta intensidad.
Doris perdió 5 kilos pero se dio cuenta de que sus hábitos alimenticios le impedían progresar. Tenía la impresión de que, aunque se sintiera llena, si quedaba comida en el plato no parada de comer. Además, su amor por el chocolate tampoco le ayudaba con su objetivo de perder peso.
Así que, Doris empezó a hacer ejercicio con Freeletics para volver a tener el cuerpo de antes del embarazo y romper el círculo vicioso en el que se había metido. Su objetivo era «fortalecer el tronco y mejorar su nivel de forma física».
Al principio de su trayectoria de transformación, Doris pesaba 73,9 kilos. Esperando con ansias el nuevo desafío y juntándose con personas que compartían ideas afines para conseguir el mismo objetivo, Doris comenzó con motivación sus 12 semanas de transformación con el Coach de entrenamiento y el Coach nutrición.
A pesar de sufrir una lesión durante su transformación, perseveró cambiando el salir a correr por diferentes ejercicios aptos para su problema en el muslo. Su gran temor era abandonar su trayectoria, pero no lo hizo. Se centró en su objetivo principal, mejorando gracias al apoyo que le brindó su familia y su equipo de entrenamiento.
A pesar de los desafíos a los que se tuvo que enfrentar, como entrenar lejos de su equipo durante el confinamiento, siempre mantuvo la motivación y su esfuerzo dio resultados. Doris ganó confianza y notó que su habilidad para esprintar y alcanzar la pelota de tenis en la pista había mejorado, también mejoró su agilidad de forma notable.
No tardó mucho tiempo en empezar a observar los cambios que deseaba. Gracias al Coach de nutrición de Freeletics, descubrió nuevos alimentos que nunca había probado antes, como las lentejas, que ahora le encantan.
Al final de las 12 semanas de su transformación, Doris había perdido 7,5 kilos y 10 cm de cintura. La Comunidad de Freeletics le ha ayudado a mantenserse motivada durante las 12 semanas y ya está planeando su próxima trayectoria porque tiene muchas ganas de volver a vivir esta experiencia de nuevo.
Mira el video para descubrir el progreso de Doris:
