La trayectoria de Didzi comenzó un año antes de empezar con Freeletics, cuando perdió unos 30 kg simplemente cambiando su alimentación. Aunque estaba orgulloso de los resultados, Didzi sabía que hacer ejercicio podía mejorar aún más sus niveles de fuerza y confianza.
Ahí fue cuando se apuntó al desafío Transformación de Freeletics, que le ayudó a ponerse en forma, enamorarse del deporte, ¡y ver resultados! Esta es su historia:
«Como médico, solía trabajar muchas horas y, al acabar las jornadas más intensas, me sentía exhausto. Me costaba encontrar la motivación para hacer ejercicio aunque sabía que me iba a sentir mucho mejor después de entrenar. Además, no me gustan mucho los gimnasios, sobre todo hacer los mismos ejercicios monótonos en las máquinas.
Mi objetivo en este desafío era perder más peso y conseguir un cuerpo más definido y atlético. Siempre quise hacer un Pullup, pero nunca había podido conseguirlo.
Para mí, el resultado perfecto sería convertir los entrenamientos en un hábito, en parte de mi rutina diaria, y disfrutar del ejercicio».
Para triunfar, hay que dejar atrás las dudas
«He conseguido lo que me propuse. Nunca pensé que llegaría a hacerlo. Siempre soñé con estar en forma, pero no lo lograba. Con Freeletics, lo he conseguido por primera vez a mis 33 años.
Estoy muy orgulloso de mí mismo. Casi todos mis objetivos han sido profesionales, y siempre he dejado a un lado mi sueño de estar en buena forma. Ha sido increíble lograrlo por primera vez en la vida.
Me siento más cómodo conmigo mismo y físicamente fuerte, lo que para mí es el hito más importante».
La importancia de reforzar los vínculos
«Esta experiencia me ha ayudado a enfocar la alimentación desde otra perspectiva y a mejorar mi relación con la comida, algo que siempre me ha costado mucho.
Con la confianza que he ganado, también ha mejorado la relación con mis amigos. En general, han reaccionado muy bien a mi transformación. Mis amigos han valorado mi compromiso y capacidad de alcanzar mi objetivo. Todo el mucho me ha apoyado mucho a lo largo de este camino».
El verdadero desafío es adquirir hábitos duraderos
«Mentiría si dijera que todo ha ido sobre ruedas después del desafío. Después de completar mi transformación, no fue fácil mantener los mismos hábitos, sobre todo porque no tenía a nadie controlándome todos los días.
Aunque no estoy tan en forma como el último día del desafío, ahora entiendo mejor cómo debo alimentarme y hacer ejercicio, e intento poner en práctica lo aprendido cada día».
Mi consejo: atrévete a empezar
«Si pudiera volver atrás en el tiempo, intentaría ser más paciente y confiar en el proceso en lugar de querer ver resultados de inmediato.
Te recomendaría atreverte a dar el primer paso para empezar tu trayectoria. Amplía tus horizontes y te permite llegar más lejos de lo que pensabas. Merece la pena. Pero el reto más difícil será, sin duda, seguir en marcha después de conseguir tu objetivo».