La grandeza puede parecer inalcanzable. Verás destellos de ella en un atleta de nivel mundial. Viene en forma de tu actor favorito. El empresario con más éxito del mundo. Pero nunca la ves en ti mismo. ¿Por qué? Porque te asusta. Si la grandeza es algo que tienes, como tus modelos a seguir, no te quedarán excusas. Si toda esa gente lo ha conseguido, ¿qué te lo impide a ti?
La respuesta es nada. La grandeza está dentro de ti. Está ahí. Créenos. Muy dentro de ti. Es lo que sueñas. Es quien te imaginas. Es donde te ves a ti mismo en 5 años, pero te da demasiado miedo decirlo en voz alta.
No es fácil. Pero nunca confundas “no es fácil” con “imposible”. De donde venimos, “imposible” solo significa que no lo quieres lo suficiente. Imposible no es un hecho. No es una declaración. Y está más claro que el agua que no es un motivo para que no lo intentes. Imposible es un atrevimiento. Es potencial. Es un reto. Y, más importante, es una hazaña.
Y sabemos que puedes lograrlo. Si estás leyendo esto, significa que estás pensando cambiar de vida. Significa que lo quieres. Y si quieres algo de verdad, lo conseguirás. Da igual lo duro que parezca.
El 99% abandonará por el camino. Pero tú, no. Tú te encontrarás entre el 1% que alcanza lo imposible. Algún día de tu vida echarás la vista atrás y sabrás que hiciste todo lo posible para aprovecharla al máximo. No tendrás arrepentimientos. Solo satisfacción. Y la mayor satisfacción en la vida es conseguir lo que otros siempre pensaron que no podrías hacer.
Confía en tu grandeza. Cree que existe. Acepta que alcanzarla vale la pena cada segundo dedicado a luchar por ella. Solo tienes una oportunidad en la vida. No la malgastes. Ni un solo segundo. Nos han dado el mejor de los regalos. Y la ocasión para que lo aproveches te está mirando frente a frente. Es tu oportunidad. Aprovéchala.