«El fitness ya no es una opción, ¡es parte de mi vida!» - Gundula

Aunque a Gundula le gustaba entrenar cuando seguía una rutina de fitness, le resultaba difícil volver a hacer ejercicio después de un contratiempo. Esto tuvo un efecto en cadena en su vida y la llevó a adquirir hábitos poco saludables que pusieron en riesgo su bienestar.

Hasta que decidió priorizar sus necesidades y recurrió a Freeletics para recibir apoyo. De esta forma, pudo retomar su trayectoria de fitness, centrarse en su salud y bienestar y, sobre todo, volver a sentirse bien consigo misma. Además, no piensa parar hasta conseguir hacer un Pullup. Esta es su historia:

«Cuando empecé el desafío de transformación, estaba emocionada y asustada. Estaba emocionada porque había esperado esta oportunidad durante mucho tiempo, pero también me daba miedo porque sabía que no iba a ser nada fácil. Nunca había sido capaz de mantener un cambio de estilo de vida semejante, y haber fracasado tantas veces antes me hacía dudar de mí misma.

Empezar una rutina siempre es la parte más complicada para mí, no lo paso bien al principio. Pero sé que cuando consigo crear una rutina, soy capaz de disfrutar del ejercicio de vez en cuando.

Elegí Freeletics sencillamente porque me gusta la idea de entrenar con mi peso corporal en lugar de con pesas, ¡es algo de lo que nunca me aburro! Sin embargo, empecé a entrenar con pesas durante el desafío y resultó ser mucho más divertido de lo que pensaba».

«Antes de empezar el desafío, mi vida era muy estresante, estaba sobrepasada de trabajo y mi dieta consistía principalmente en pan, pasta y muy pocas verduras y frutas.

Mis días eran un caos y siempre ponía las necesidades de los demás por delante de las mías. Sobre todo porque no tenía ni idea de qué necesitaba realmente para sentirme bien o estar conforme conmigo misma. Darme cuenta de esta realidad y aceptarla no fue fácil, pero me condujo a Freeletics y al desafío de transformación. Sabía que quería empezar una nueva vida.

Mi objetivo para el desafío era claro: priorizar mis necesidades, mi salud y mi bienestar. Quería volver a ser yo misma. En última instancia, mi principal desafío era cambiar cómo me sentía y me veía a mí misma.

Aparte de eso, quería sentirme un poco más «ligera», tanto en el plano físico como en el psicológico. Quería desarrollar nuevos hábitos de alimentación y entrenamiento, así como encontrar una manera de establecer límites. También quería abandonar el hábito de consumir comida rápida y no comer con regularidad».

«Al empezar el desafío, aunque tuviera muy poca energía, sabía que tenía que hacer ejercicio a toda costa. Algunos días me gustaba hacerlo, otros no. Pero al final, el fitness dejó de ser una opción, ¡se convirtió en parte de mi vida!

Desde que superé la mitad del desafío, entrenar me hace feliz. Durante los workouts, y al terminar las sesiones, me siento agotada Y feliz al mismo tiempo.

Cuando entreno por la mañana, estoy de mejor humor durante el resto del día. Tengo más energía, estoy más relajada y soy más resiliente que cuando no entreno, es como una droga. Además, ¡tengo un horario fijo y empiezo el día con este momento tan importante para mí!

No puedo creer el enorme efecto que ha tenido el fitness en mi estado de ánimo y mis niveles de energía, es algo que no me esperaba. Sobre todo porque estaba empezando a tener síntomas de agotamiento y depresión antes del desafío.

Pero solo unas semanas después, los síntomas desaparecieron. Aprendí a priorizar mi salud mental y física, y por fin empecé a sentirme como yo misma de nuevo.

Cuando ponía música antes del amanecer y empezaba a entrenar, en ese momento nada más importaba aparte de mí misma. ¡Y eso me encantaba!».

«A lo largo del desafío, hice muchos cambios en mi estilo de vida aparte de hacer ejercicio, lo que mejoró mis niveles de estrés.

Empecé a comer de forma más saludable y con una planificación adecuada acabé con el estrés relacionado con las comidas. Preparar comidas con antelación fue un punto de inflexión. Es increíble lo fácil que puede ser tomar decisiones saludables si no tienes que pensar de dónde vas a sacar esas comidas saludables.

Otra gran enseñanza del desafío fue dar a mi cuerpo y mi mente tiempo suficiente para descansar, algo que se suele pasar por alto en la sociedad en la que vivimos. Pero esto me sigue costando.

Dormir el tiempo suficiente, por ejemplo, ha sido y sigue siendo un problema para mí. Estoy ocupada durante todo el día y tengo limitaciones de tiempo, pero intento hacerlo lo mejor posible. En definitiva, nunca he tenido tanta energía».

«Uno de mis objetivos con el desafío era hacer un Pullup, y todavía me falta un poco para conseguirlo. ¡Pero no pasa nada!

He progresado mucho y las bandas de resistencia que utilizo para impulsarme al hacer Pullups cada vez son más finas. Sé que conseguiré hacer ese Pullup en los próximos 3 o 4 meses, ¡estoy convencida!».

«No esperaba la poca relevancia que tendrían mi peso y mi apariencia durante el desafío. Sí, han sido una muestra de mis esfuerzos, pero no han tenido ni tienen tanta importancia cuando lo comparo con el resto de las cosas que he conseguido.

¡Puedo hacer más ejercicios y aguantar más tiempo! ¡Y esa sensación es increíble! Ahora puedo hacer un Plank durante dos minutos enteros, y al principio no podía mantener la postura ni 10 segundos.

Me siento genial porque he aprendido que puedo hacer mucho más de lo que nunca imaginé. Así que pruebo muchos más ejercicios y descubro que soy capaz de hacerlos, lo que se siente como un pequeño triunfo cada vez.

Y esto no es algo que solo siento al hacer ejercicio. Me he vuelto más valiente y más espontánea. Ahora pruebo cosas sin pensar en si puedo hacerlas o no.

Simplemente inténtalo y descúbrelo, y si no puedes hacerlo ahora, como el Pullup, ¡algún día lo lograrás!».

«No pienses en las expectativas de tu trayectoria, simplemente confía en el proceso. Porque todo lo que puedes imaginarte es poco. Lo único que puedes esperar es que los primeros dos meses sean horribles, porque lo serán. Pero pasado ese tiempo, ¡no querrás volver atrás!».