¿Te sientes últimamente diferente? ¿Has saltado de la cama esta mañana cuando normalmente ruedas? ¿Te sientes más motivado, consigues más PBs y eres más positivo? No es una coincidencia. El reciente cambio de estación trae más que un clima más cálido. Parece que te ha afectado la fiebre de primavera. Pero para saber si nuestro diagnóstico es correcto, aquí te explicamos algunos síntomas posibles:
Aumenta los niveles de energía
¡Por fin… luz solar!! Después de un largo y frío invierno, es fácil olvidarse de cómo es la luz del sol. Este aumento de sol y luz del día, te ofrece mucho más que una luz cálida y la oportunidad de disfrutar del café al exterior. También por eso mucha gente experimenta una inyección real de energía. Esto sucede porque nuestro cerebro produce menos cantidad de la hormona del sueño, melatonina, que normalmente se produce como respuesta a la oscuridad. De esta manera, en primavera, cuando hay periodos más largos de luz diurna, baja la producción de melatonina. Por esta razón, donde antes todo lo que queríamos después de trabajar era dejarnos caer en el sofá, pedir una pizza y tropezar sobre la cama, ahora realizamos más actividades de ocio durante la noche. Otra razón por la que aumentan los niveles de energía es la dosis adicional de vitamina D del sol primaveral. Aprovecha esta energía adicional y llévala al lugar de entrenamiento.
Mejor estado de ánimo y motivación
¿Estás más motivado para hacer ejercicio en el exterior? En primavera, el “calor” y la “comodidad” del gimnasio, parece más “sofocante” y “saturado”, y el aire fresco toma fuerza. Además de esto, notarás cómo te haces mucho más social. Los grupos de entrenamiento vuelven a aparecer en primavera y el aire limpio del exterior tiene un impacto positivo en nuestro estado de ánimo en general.
Ganas de comer comida más ligera
A medida que aumenta la temperatura, disminuye el hambre de guisos y sopas calientes. De manera natural, el cuerpo empieza a tener ganas de alimentos más ligeros y frescos. Y afortunadamente, los supermercados y los mercados de agricultores y granjeros abastecen de estos alimentos. Compra coloridas verduras y frutas de temporada y sé creativo con las ensaladas y los smoothies para alimentar el apetito primaveral y realizar una limpieza natural.
Cambios de horarios de entrenamiento
¿Te has despertado alguna vez en invierno, has mirado por la ventana y has decidido que el entrenamiento puede esperar al día siguiente? Entonces notarás que esto cambia en primavera. Los días más largos, el cambio de hora y las mañanas más luminosas cambian nuestra rutina diaria. Y aquellas personas que entrenan normalmente durante el fin de semana o por la tarde-noche, se levantan antes para hacer el workout y empiezan el día con un logro conseguido.
¿Están todos los síntomas ahí? Entonces aquí te damos nuestra fórmula:
Levantarse pronto por la mañana.
1 dosis de actividad física al día.
Si los síntomas continúan, sigue esforzándote y fija incluso objetivos más grandes.
En vez de una rápida recuperación, esperamos que tu fiebre de primavera dure mucho tiempo. ¡Disfruta!